Desde hace tiempo la lavadora anda muy delicada. Si le metes más peso de lo que a ella le parece aceptable se pone en huelga y no centrifuga!
Es una señorita!
Es una señorita!
Bueno pues hoy la lavadora murió!! No sólo no ha centrifugado si no que no ha desaguado y me ha dejado la papeleta de una tina llena de ropa empapada!!
Justo hoy, el día más caluroso del año!! grrrrr!!
Nada, a escurrir a la interperie trapo a trapo con mis manitas delicadas. Después de tres calcetines ya no sentía las manos así que he optado por colocarme guantes de goma. Vale, ya sé que la goma no es famosa por su propiedades caloríficas, pero por lo menos no me las mojaba.
Y después de esta experiencia me pregunto porque no hay ningún monumento a nuestras abuelas o bisabuelas!!??
Que las mías lavaban en las acequias arrodilladas y en pleno invierno!!!
Ni Catwoman, ni SuperWoman, ni ninguna de esas que salen en los comics!! Las verdaderas heroinas son las mujeres que se han dejado las manos lavando la ropa en aguas heladas!!!
Lo siento, esto lo tenía que decir, que casi lloro del dolor de manos esta mañana!!!
Volvamos al tema que nos interesa.... Tartitas
Esta tarta fue la victima de mis primeras flores de pasta de goma, que gracias a Cecilia (Nanatartas) y a Montse (Sweet and the city) he aprendido a hacer!
Bueno, la flor grande es gracias al libro de Patricia Arribalzaga!!
Esa flor se llama Ranúnculo y hay quien le encanta y quien no le gusta nada... parece una alcachofa, ya lo se, pero es una alcachofa.