Ni la contractura muscular más persistente y dolorosa me impide liarme con la harina, azúcar,huevos, mantequilla y demás ingredientes.
Me visitó una contractura y no quiere irse... se lo he pedido por favor, la he obligado con ibuprofeno, con calor, con relajantes musculares y nada aquí sigue; unos días más chillona y otros más silenciosa. Estoy aprendiendo a vivir con ella!!
Y después de quejarme por aquí de mi amiga contractura en el cuello os cuento que hace unos días tuve la oportunidad de hacer una tartita de amooor...
Ohhhh!! L'Amour!! La plus belle chose!!
Y no un amor cualquiera, es ese tipo de amor, de los primeros amores.
De esos amores que celebran San Valentín.
De esos amores románticos e intensos.
Y como es tan intenso se celebran los mesarios (aniversario de meses, me encanta inventarme palabras)
Para celebrar 3 meses de ese amor cree esta tarta.
Me la encargó nada más y nada menos que un príncipe!!
De esos que no existen, solo en los cuentos de los Hermanos Grimm... y si no existen...¿sería un fraude este príncipe?
Sea o no lo sea lo cierto es que fue divertido tratar con todo un personaje de la realeza.
Y por eso tuve que coronar a este osito amoroso, que trae un cupcake como regalo romántico.
Una mini tarta romántica y sorpresa para celebrar 3 meses.
Príncipe, me alegra mucho saber que conseguiste sorprender a tu chica con esta tarta y que además os gustó.
Agradezco también que me lo hicierais saber!
Me encanta que mis tartas formen parte de momentos tan bonitos
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